miércoles, 5 de diciembre de 2012

Crítica de "Nader y Simin: Una Separación" de Asghar Farhadi


NADER Y SIMIN: UNA SEPARACIÓN.

Cine con mayúsculas.

Hay películas, que antes de verlas, más o menos imaginas por dónde pueden ir los tiros en cuanto al desarrollo de la trama y sobre cuál será la actitud de los personajes a lo largo de la cinta.

Este hecho me viene perfecto para desmentirlo con este atípico caso. "Nader y Simin: Una Separación", además de ser grandiosa, no solo se "queda" con el espectador en el mejor de los casos, sino que además lo premia regalándole un final que lo deja reflexionando y que a muchos dejará satisfecho (a servidor le pasó).

El subtitulo del título del film  muestra lo que vamos a ver sólo durante el principio del film.  La separación es algo secundario. El rencor, el deseo de venganza, la pérdida de la esperanza, los malentendidos y el sufrimiento al que se  verán sometidos algunos de los protagonistas crean en el espectador un cierto debate interno sobre lo qué es correcto y si de verdad estaríamos dispuestos a realizar actos que podrían ser mal vistos por el entorno en el que se vive. La unión de una familia iraní
se verá tambaleada por múltiples causas que el espectador deberá juzgar, sin pretensiones.

El guión escrito por Farhadi es  perfecto. Personajes perfectamente dibujados, diálogos realistas y sin caer en lo rídiculo. Y si a eso le añadimos un saber hacer estupendo a la hora de seguir con la historia por parte del realizador, mejor que mejor. A pesar de las cerca de 2 horas de duración de la película, gracias a la agilidad y al ritmo acelerado, se hace fácil y gustosa para todos aquellos espectadores que le den una oportunidad y quieran dejarse llevar por un magnífico film.

El trabajo del elenco de actores tampoco se queda atrás realizando todos un buen trabajo, remarcando sobre todo a la pareja protagonista, muy convincentes en sus roles y con una química impresionante.
Se puede decir de "Una Separación" es el claro ejemplo sobre lo que debe ser una cinta; estar bien escrita, dirigida con precaución y  actuada de manera excelente.

Multipremiada en el Festival de cine de Berlín en el 2011, y ganadora del Oscar en la categoría de mejor película de habla no inglesa, se entiende el amor desbordado por parte de la crítica hacia ella.
¿Estamos ante una obra maestra? Pues sinceramente, es díficil de prever en estos momentos, pero en mi más sincera opinión, creo que correra la misma suerte que "Amelie" de Jean Pierre Jeunet. Vale, no generará el mismo fenómeno fan, pero si que tendrá sus incondicionales que la encumbrarán y la recordarán durante muchos años, al igual que hicieron con la alemana "La vida de los otros" (otra obra maestra que animo a quien no la haya visto que se deje llevar con la historia).

Poco más puedo decir sobre "Nader y Simin". Puede que a algunos no le chifle, pero es imposible no caer rendida a sus pies, y esto, para mí, es cine.

LO MEJOR: Diálogos realistas que conectan hasta con el espectador más exigente.
LO PEOR: Que se la subestime

NOTA: 10

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