5 razones por las que "Los Odiosos Ocho" de Quentin Tarantino mola tanto

LOS ODIOSOS OCHO

Tarantino madura y acierta

Que Quentin Tarantino es uno de mis directores favoritos es algo que no voy a negar porque es una verdad como un templo. Controversia, violencia, humor ácido e irreverencia son algunas características de su cine y cada vez que saca adelante una cinta el público responde la mayoría de las veces con interés. Sin embargo, con Los Odiosos Ocho no ha obtenido el consenso crítico que siempre suele tener y no está llegando a recaudar tanto como se esperaba en mercados como el estadounidense. ¿Es realmente una película menor en su filmografia o simplemente la polémica racista le ha perjudicado? En Cine para iniciados nos pasamos al bando positivo y os resumimos en 5 razones porque Los Odiosos Ocho molan más que otras películas de Tarantino. Empecemos:

CAPÍTULO 1)
El guión es redondo y superior al de Django

Engancha desde la primera frase y juega muy bien con los saltos de tiempo. En Django los flashbacks estaban un poco metidos con calzador y en la parte final se notaba bastante inconexa a pesar de su coherencia con el hilo central argumental. Los personajes no obstante no llegan a alcanzar el carisma de los de Malditos Bastardos o incluso Pulp Fiction, pero el hecho de que se repartan el protagonismo mejora el conjunto final de Los Odiosos Ocho.

CAPÍTULO 2)
Las mujeres al poder
Jennifer Jason Leigh hace una actuación portentosa y consigue encumbrar a su personaje siendo la robaescenas y el descubrimiento de la película. En un año en el que el poder de las mujeres está siendo más reivindicado que nunca en el mundo del cine, aportaciones como estas son dignas de mención. Daisy Domergue se une a la numerosa lista de "chica Tarantino" en las que aparecen desde la grandiosa Shoshana de Malditos Bastardos a La Novia de Kill Bill.

CAPÍTULO 3)
La banda sonora de Morricone es adictiva
El genio responsable de la música de Erase una vez en América, Cinema Paradiso o la más reciente La Gran Oferta deja su huella en la cinta con sonidos intrigantes y adictivos que perturban y encantan. Forma parte de la trama prácticamente y actúa de manera fascinante entre escena y escena, como si fuéramos testigos de una obra teatral en la gran pantalla. Un trabajo que merecería el Oscar si no fuera por un año tan competido.

CAPÍTULO 4)
La violencia mejor filmada
Pocos directores tienen la capacidad de mostrar la violencia de una forma tan sangrienta y a veces exageradamente divertida. La violencia está integrada magistralmente, como siempre, y la lluvia de sangre está asegurada. Ya quisieran muchos tener esta capacidad tan única y potente.

ÚLTIMO CAPÍTULO
Quentin ha madurado
Desde Django Desencadanado a Los Odiosos Ocho parece que han pasado más de 10 años, pero en realidad han sido 4. Tarantino nos propone un viaje en diligencia hacia un único escenario en el que pasan muchísimas cosas y se queda tan ancho. 170 minutos de diálogos ingeniosos, entretenidos y que dejan un sabor de boca... Todo ello sin renunciar a su estilo. En su octavo film ha asentado sus bases autorales y nos presenta a un director más centrado e igual de loco que siempre.

Gracias a este legado de películas, Quentin ya es parte de la historia del cine. Por ello os recomiendo e insisto que acudáis a las salas a ver su nuevo trabajo. No deja indiferente a nadie.